18/07
Reflexió i entrevista a LaCol de Disculpen las Molestias
De ciudades imaginarias…pero posibles de Disculpen las Molestias
“Como un gigante invisible, escondido tras los muros. Así es como han querido definir a Can Batlló los artífices de este documental que hace unas semanas se presentaba en el COAC. ’Com un Gegant Invisible. Can Batlló i les Ciutats Imaginàries’, realizado por LaCol y Panóptica, reflexiona de forma crítica acerca de la ciudad contemporánea a través del caso específico del recinto fabril de Can Batlló, un espacio con una larga historia de reivindicación vecinal y que actualmente se encuentra en proceso de reapropiación por parte de la ciudadanía. Tras 35 años esperando a que se cumpliera la promesa de dotar de equipamientos y espacios verdes al barrio de la Bordeta, los vecinos se agruparon en la plataforma Recuperem Can Batlló y le dieron un ultimatum al ayuntamiento para que cumpliera lo que se había prometido en el Pla General Metropolità de 1976: si en junio de 2011 no habían comenzado las obras en el recinto, los vecinos entrarían a Can Batlló y comenzarían a construir los equipamientos por sí mismos. Así fue como se logró la cesión de una nave, el Bloque 11, que actualmente funciona gracias al esfuerzo de todos los vecinos.
En el documental se analiza, a través de las voces de arquitectos, urbanistas, historiadores y vecinos, no solo la experiencia de Can Batlló, sino también cuáles han sido los intereses y las estrategias que ha habido detrás de las transformaciones urbanísticas de Barcelona durante los últimos 30 años. Pero no sólo eso, también hay una mirada al futuro y, sobre todo, a un futuro en el que otras Barcelonas posibles dejen de ser ciudades imaginarias. Hablamos con los miembros del colectivo de arquitectos LaCol para que nos cuenten algo más sobre este proyecto.
En el documental incidís bastante en el hecho de que uno de los factores del cambio es que la ciudadanía deje de suponer que el gobierno tiene que hacerlo todo y empiece a participar más en las decisiones sobre el lugar que habita. ¿Qué se puede hacer para conseguir que el ciudadano de a pie se motive para participar y esforzarse en cambiar su entorno urbano? ¿Algunas tácticas o estrategias?
Para motivarse hay que conocer el ámbito en el que se quiere actuar. Debería de hacerse más pedagogía sobre los mecanismos del sistema, destaparlos, anunciarlos. Ser más transparentes en general para tomar así consciencia del impacto real de nuestras decisiones como ciudadanos. Con estos mecanismos fomentaríamos la autocrítica. La divulgación de procesos que combaten el sedentarismo, físico e ideológico en pro de la auto-organización, y el aprovechamiento de las redes son también resultado del conocimiento del medio político-social en el que vivimos. Para ello no hay que viajar ni estar todo el día conectado, basta con que cada individuo preste atención al entorno local en el que vive y comprenda la influencia de la cotidianidad en el transcurso de los días. “¿Quieres ser ciudadano, o cliente pasivo del orden urbano? La ciudad es para quien se la trabaja” (Itziar González).
Aparte de Can Batlló, ¿podéis identificar en Barcelona otros edificios o instalaciones abandonadas y susceptibles de ser ocupados o intervenidos por la ciudadanía?
Todo aquello susceptible de resolver necesidades, demandas sociales. Por demandas sociales no sólo se entienden equipamientos y arbolado, sino todo aquello que influye en nuestras vidas, a todos los niveles: combinación de pequeña y mediana industria con residencia, complejidad de usos en un mismo enclave, megáfonos culturales y artísticos, etc.
El contexto actual de crisis, como se dice en el documental, favorece que la gente se plantee la autogestión. ¿Tenemos que tocar mucho más fondo, necesitamos que la crisis se agudice aún más, para que esa tendencia se extienda también?
No. Ya hemos tocado fondo, y más de lo que creemos. Debemos desarrollar y mantener el ejercicio democrático. De hecho nunca se ha dejado de ejercer por algunas minorías, de proponer alternativas que cíclicamente afloran y vuelven a estar de moda. Y es este concepto de “estar de moda” el que debería ponerse en crisis por su connotación efímera, las personas vivimos más tiempo de lo que dura un período electoral o un eslógan nacido del márqueting. La sustitución de la burocracia por la transparencia y exposición de temas en asambleas abiertas a cualquiera que se comprometa con la causa obliga al reciclaje continuo e introducción de problemáticas simultáneas al proceso. De este modo, la autogestión es una vía que asegura la adaptación a los cambios y, por tanto, es intrínsecamente evolutiva. Pocos pasos, pero siempre hacia adelante. La administración, un modelo jerárquico y burocrático, da grandes pasos que conducen a la inadaptación, generando incluso la obligación a adaptarse, y que muchas veces resultan involutivos.
¿Qué le diríais a la administración pública sobre la gestión y uso que se está haciendo de los espacios públicos en Barcelona? ¿Qué 3 sugerencias le haríais respecto a la cuestión urbanística?
Ese espacio que se empeñan en vender como público lo han convertido en espacio estatal (¿en qué momento fue legítimo que los administradores de los recursos del pueblo comercien con el erario público?) y que el espacio coloquialmente conocido como público, es más preciso llamarlo libre. Deberíamos liberar este espacio público e introducirlo al código de comportamiento vecinal y no de consumo o de maquillaje turista. Adaptarlo a las necesidades locales del mismo. La homogeneización de las ordenanzas no refleja la diversidad de la ciudadanía. Somos muchos y no somos iguales. Y nuestras tres sugerencias serían: 1) Hacer una convocatoria popular para demoler el hotel Vela y aprovechar los escombros para tapar el puerto de lujo que están construyendo en el Port Vell; 2) Siempre en términos de ciudad y no personales: si se quieren aplicar criterios de densificación para derruir barrios de “casas baratas” como la Colònia Castells o el Bon Pastor (alrededor de 40 viv/Ha), ¿por qué no hacerlo también con los barrios de más baja densidad como Pedralbes (alrededor de las 17 viv/Ha)? 3) Que el premio del bingo en Eurovegas sea una ruta virtual de lo que fue y pudo haber sido el parque agrario y fluvial del Besòs, vamos, como es hoy.
¿Dónde se puede ver el documental actualmente?
Queremos moverlo por universidades, centros sociales, festivales, instituciones y todos los espacios en los que creamos que tiene sentido. Por el momento lo hemos proyectado en las demarcaciones del COAC de Barcelona y Tarragona. Para verlo online pasará un poco más de tiempo, ya que creemos importante poder acompañar al documental en la medida de lo posible. Aunque nuestra intención es que más adelante se puede ver en internet.”