El proyecto es una promoción de vivienda cooperativa en cesión de uso, impulsada por Sostre Cívic, que asume el reto de construir un edificio en poco tiempo. Por este motivo, desde el inicio se opta por una estructura de hormigón prefabricado que agiliza los procesos. El edificio cuenta con un total de 60 viviendas, aparcamiento, un local municipal y espacios comunitarios, todos ellos pensados para fomentar la convivencia y el vínculo con el entorno.
A nivel volumétrico, el edificio se compone de una planta baja que acoge el local municipal de 500 m², así como los accesos y una sala polivalente. Sobre esta base se levantan dos volúmenes destinados a viviendas y espacios comunitarios, con alturas de 3, 7 y 3 plantas. Las viviendas se organizan alrededor de núcleos de circulación vertical desde la planta baja, y se distribuyen mediante pasarelas exteriores orientadas al sur. En cuanto al aparcamiento, se prevé el 50% de las plazas exigidas por normativa (POUM) y se reservan espacios para bicicletas, fomentando una movilidad más sostenible.
El proyecto pone especial énfasis en su integración urbana y en la relación con el entorno. El volumen se compacta y se ajusta a las alineaciones de la calle para definir su perímetro, a la vez que se separa de la escuela cercana para reducir su impacto. Además, se amplía el espacio público hacia el interior del edificio a través de un porche que conecta el parque con el patio posterior, que se convierte en una extensión natural del espacio comunitario. Se priorizan los recorridos exteriores con pasarelas abiertas para favorecer el contacto con el exterior y reducir el consumo energético. También se conectan los espacios exteriores de la planta baja, la primera y la cuarta, fomentando la vida en comunidad.
- Colaboradores: Societat Orgànica (consultoria ambiental), M7(ingenieria), BBG (estructura), Arrevolt (control costes y DEO), Àurea acústica (acústica)
- Año inicio: 2024
- Client: Sostre Cívic SCCL
- Emplazamiento: Carretera del Pont de Vilomara, Manresa
- Superfície: 5848 m2